Domingo de Ramos y Palma Bendita
Lourdes Dubuc de Isea
Viernes, 8 de abril de 2011
Viernes, 8 de abril de 2011
En ceremonia expresiva de devoción y fe los católicos hemos asociado la entrada de Jesús a Jerusalén escoltado por ramos y palmas. Nunca nos preguntamos de dónde venían las palmas. Las cruces y otras artesanías que se distribuían gratuitamente en las plazas, frente a las iglesias, las llevábamos a nuestras casas con la convicción de que su presencia alejaría las malas influencias.
La naturaleza y sus recursos son finitos. La población crece de manera exponencial y algunas veces la interviene sin escrúpulos cuando se trata de obtener distracción o beneficios económicos. Residentes de áreas rurales denuncian el exceso, violencia y destrozo que precede a la Semana Santa cuando, en bosques nublados y páramos andinos, la palma es extraida y transportada en camiones para luego venderla.
Qué hacer para continuar la tradición y detener el riesgo?
La Palma de Ramos o Cera (Ceroxylum sp.) es una planta de lento crecimiento que alcanza su edad reproductiva (producción de semillas) luego de 40 a 100 años de crecimiento. Es muy difícil de propagar y no se regenera. Esta palma ha sido utilizada de manera indiscriminada, año tras año, para celebrar el tradicional Domingo de Ramos, actividad que, unida a la expansión de la frontera agrícola y ganadera, ha disminuido notablemente sus poblaciones, hasta el punto de ser considerada una especie amenazada que está a punto de desaparecer En: http://mioplanet.org/celebra-el-domingo-de-ramos-con-plantas-vivas.
La Unesco contempla entre las especies vulnerables y en peligro a cuatro variedades de Ceroxylum sp En Ecuador y Bolivia hablan del “viacrucis de las palmas en la Semana Santa”, acusan la extinción casi completa de esta especie y consideran que las autoridades eclesiásticas han sido, son y serán fundamentales para persuadir a la conciencia ciudadana a celebrar con “ramos” que no provengan de la palma. En: http://mioplanet.org/
En Bogotá, capital de Colombia, según información extraída del periódico El Tiempo (25/03/2005) a partir del año 1996 ante la devastación de las palmas en “parques, cerros y zonas rurales” alrededor de 10 instituciones públicas y privadas efectuaron campaña de educación ambiental Reconcíliate con la Naturaleza que indujo a sustituir ramos extraídos de la palma por plantas vivas. En el año 2005 más de 30.000 palmas, cultivadas en viveros y portadas por los feligreses en envases de material reciclable (cartón, barro o papel), fueron bendecidas en el templo eucarístico del Parque Simón Bolívar[1].
En el IVIC, Caracas, la celebración de sus primeros 40 años incluyó la inauguración del Sendero de Árboles Amenazados, ruta ecológica de 300 metros de longitud donde se cultivan algunas especies arbóreas amenazadas de extinción en Venezuela, tales como: palma bendita, caoba, nogal andino, cedro y nogal.
Tambien en Caracas, la Universidad Metropolitana y la organización ambiental Vitalis con apoyo del Ministerio del Ambiente, Exxon Mobil de Venezuela, Asociación Venezolana de Palmas e INPARQUES, en el marco del programa “Horizontes verdes” que tiene como meta incrementar el número de árboles en las áreas urbanas y promover la recuperación de ambientes degradados, se inauguró el primer vivero del país dedicado a la reproducción de especies emblemáticas del Parque Nacional El Ávila: nogal, yagrumo, palma bendita, aguacatillo y araguaney.
Voceros del Vaticano han declarado que la tierra y sus bienes son un don que podemos usar, mejorar pero no destruir. Atentar contra el medio ambiente es un insulto a Dios, un pecado grave. En la Encíclica Centesimus annus el Papa Juan Pablo II afirmaba: el ser humano es un colaborador de Dios en la obra de la Creación..debe ser consciente de sus deberes y tareas para con las generaciones futuras. De ahí la importancia de educar en una ética de la responsabilidad. El actual Papa Benedicto XVI reafirma:sin un adecuado límite ético y moral, el comportamiento humano puede trasformarse en amenaza y desafío
La Conferencia Episcopal y Cáritas de Venezuela 2011 han enviado a las parroquias eclesiásticas la publicación Justicia Ambiental para fomentar la cultura de la vida, centrada en la ecología humana, lograr comunidades responsables y solidarias con su entorno... hacia una correcta concepción del medio ambiente y la relación de parentesco entre el hombre y éste, con sentido de gratitud y obediencia hacia el Creador. [2]
Mantener el uso de la Palma Bendita como práctica religioso-cultural en la Semana Santa afecta la biodiversidad de los ecosistemas boscosos montanos. Qué alegría tendríamos todos si la palabra docta y prudente de sacerdotes y obispos persuadiera a la feligresía venezolana a portar ramas de pino, romero, eucalipto el próximo Domingo de Ramos e inducir para el futuro próximo la multiplicación de viveros de palma cultivada que se ofreciera en venta a los fieles con lo cual se reafirmaría la tradición y los oferentes tendrían la posibilidad de incrementar sus ingresos sin dañar la obra de Dios en su Creación infinitamente noble, bella y útil…
Cuidar la casa de todos.. reducir la vulnerabilidad..generar conciencia y formación para que la comunidad asuma actitudes de resguardo es tarea que todos debemos asumir responsablemente.
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