Si se ha decidido en estas Navidades, regalar una mascota, es necesario considerar antes algunos puntos importantes, para que no se convierta en sufrimiento, ni para la familia ni para la mascota, un corto rato de alegría.

Es común, cuando se tiene que dar un regalo, que se piense en un perrito, un gatito o algún otro tipo de animal vivo. Cualquiera que éste sea, se debe procurar su bienestar, dándole los cuidados que requiere: higiene, comida, agua limpia, lugar cómodo, a buena temperatura, para dormir y descansar. También debe contar con un espacio donde tenga sol y sombra.

Es de sobra sabido que a veces se condiciona el “regalo” para que un niño aprenda a ser responsable. Se deja al niño el cuidado del animal y, peor aún, se le amenaza con que si no lo cuida, nadie lo va a hacer por él, provocando que la mascota sufra. Tratar de educar a un niño a costa de un ser vivo es injusto para ambos.

Compartir su cuidado

Un menor no debe ser condicionado a bañar a su mascota, sacarla a pasear, darle de comer y limpiar sus necesidades, entre otras cosas, a cambio de satisfacer su deseo de adquirir un animalito. La responsabilidad debe ser compartida entre los involucrados. Los cuidados al animal deben estar siempre supervisados por un adulto.

Atención médica

La visita al veterinario y aplicación oportuna de las vacunas, tanto en perros como en gatos, es una obligación para con la mascota. Esto protege la salud familiar y le evitamos a nuestro “amigo” un sufrimiento innecesario. Ellos, como los humanos, son susceptibles a contraer enfermedades, a sentirse tristes o contentos, pero sobre todo aman sus dueños.

Necesitan amor

El cariño y compañía es parte importante del buen trato porque ellos dependen de sus dueños. Son éstos quienes eligen llevarlos a casa, y por lo tanto su vida y su bienestar es responsabilidad de quienes tomaron esa decisión y tienen que responder y velar por ellos.

Resultó ser un problema

Si por desgracia empiezan a estorbar porque significan demasiado trabajo, después de haber sido deseados y hasta queridos, muchos de estos “regalos” terminan abandonados en las calles, sufriendo sed, hambre, miedo y las inclemencias del clima, por decir lo menos.

En todas las ciudades hay albergues que se caracterizan por recibir mascotas no deseadas o abandonadas en la calle. En muchos paises, como es el caso de México o de España donde se les procuran cuidados mientras encuentran un hogar. Lo ideal es tener siempre a la mano un número telefónico para reportar cualquier emergencia.

Un regalo vivo

Si a pesar de todo, se decidió por adoptar un ejemplar del reino animal, lo conveniente para éste y quienes quieren adoptarlo, es prepararse con tiempo para la adquisición y elegir la mascota ideal. Tomar siempre en cuenta que cualquiera que sea el resultado y la decisión respecto al animalito, el trato que se le proporcione debe ser siempre de respeto.

A documentarse

Por exagerado que parezca, es necesario investigar sobre el cuidado adecuado, la forma de alimentación e higiene, necesidades afectivas, carácter de la raza o tipo de mascota. Seguir en lo posible las indicaciones de los expertos facilitará la convivencia entre la familia y el nuevo integrante.

Felicidades por la nueva mascota y los mejores deseos porque también para ésta, la nueva familia sea un regalo de por vida.