DOS HISTORIAS PARA LLAMAR LA ATENCIÓN CONTRA EL COMERCIO Y EXTINCIÓN ANIMAL
Mauricio es un Mico cariblanco, su nombre científico es Cebus Albifrons, también se encuentra en el Centro de educación ambiental y rescate animal de la Asociación Protectora de Animales y las Plantas de Pereira. Desde bebé fue amarrado a una cadena hasta sus cinco años de edad, un tiro le amputó un dedo y no tiene posibilidades de ser liberado, ya que no puede sobrevivir en su medio natural.
El drama de estos animales no tiene fin, en la mayoría de los casos son transportados en condiciones precarias, siendo drogados, atados y empacados sin ventilación. Muchos de estos animales mueren, ya sea por asfixia, pérdida de sangre o ahogados en su propio vómito o en su orina. Es por esta razón que se dice que cuando un animal producto del tráfico ilegal llega a su lugar de destino, diez de su misma especie han muerto en el transporte.
Los animales silvestres que son utilizados como mascotas sufren de gran estrés por el encierro, la mala alimentación, la soledad o por el simple hecho de no encontrarse en su hábitat natural. Un ejemplo de ello es Mauricio, el mico cariblanco, este primate que en su medio natural es ingenioso e inteligente y vive en manadas con una organización social, está confinado a la soledad y el encierro.
(noticia desde periodico La Patria, Colombia)
Esta noticia nos demuestra una vez más que como se suele decir vulgarmente “en todos los paises se cuecen abas” osea que los humanos somos igual de destructores de nuestro entorno de la misma forma, en todas partes los humanos son poco conscientes de lo que se les viene encima si siguen por ese camino de destrucción
Este testimonios de vida quiere llamar su atención sobre el tráfico de fauna silvestre en nuestro país. Este negocio ilegal es el segundo más lucrativo en el mundo después del narcotráfico.
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